Bicicleta urbana y movilidad

  • Vías Segregadas

Dentro de la categoría “vías ciclistas segregadas” existen distintas modalidades según el grado de segregación (senda-bici, pista-bici, acera-bici, carril-bici).

- La acera-bici tiene la desventaja de que el ciclista no está segregado físicamente del espacio peatonal y puede generar conflictos con los peatones si no hay suficiente espacio. Las últimas ordenanzas municipales tienden a evitar o prohibir este tipo de carriles.

- El carril-bici tiene la ventaja de que es bastante fácil y económico de implantar, ofrece mucha flexibilidad a los ciclistas pero, a su vez, los expone directamente al tráfico y es menos adecuado para los no tan experimentados. Además, en ciudades con un alto uso de motocicletas existe el problema de que las motos invaden el carril-bici.

- Otra tipología es la senda-bici, que discurre independiente de la red viaria por parques o la pista bici en espacios libres.

  • Vías Integradas

En relación con la integración hay varias tipologías para introducir la bicicleta en la sección viaria, que puede ser compartida con los peatones, o compartida con los coches. En este caso se ha marcado una línea para definir el espacio recomendable para la bicicleta que deberían dejar libre los coches, aunque en determinados casos un camión u otro vehículo grande pueden también invadir este espacio si no hay ciclistas.

Otra modalidad es compartir con el autobús su carril, sin embargo, también hay que tener en cuenta los criterios recomendables para aplicar esta solución, es decir, que la intensidad de los autobuses no sea alta.

Finalmente, otra reflexión muy importante es la conveniencia de diseñar vías de doble sentido o bandas unidireccionales.

Los cruces

El diseño seguro de las intersecciones con vías bidireccionales es bastante complicado ya que los conductores no suelen tener en cuenta que un vehículo se puede aproximar en dirección contraria.

Como regla general se puede afirmar que la variante bidireccional no es recomendable en tramos urbanos, donde tenemos muchas intersecciones, vados, y tránsito peatonal. Excepcionalmente, en tramos largos o donde hay un atractivo especial en uno de los laterales de la vía, una sección bidireccional puede ser adecuada. Sin embargo, cuando hay mucho tráfico o una velocidad muy elevada es más recomendable segregar al ciclista del tráfico motorizado.

Para definir el grado de segregación, por ejemplo, elegir entre un carril-bici o una pista-bici, hay que tener en cuenta la existencia de aparcamientos, la pendiente de la calle, el tránsito peatonal, etc.

 
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