Todo apunta a que cada vez serán más excepcionales los casos de personas que se jubilen en una empresa después de toda una vida de dedicación a la misma y, sin embargo, podremos comprobar el crecimiento de los casos de personas que desarrollen funciones concretas, pero con dedicación parcial, como profesionales independientes, y dedicados a diferentes empresas de forma simultánea.
Dentro del actual modelo de relaciones laborales, muchas empresas eligen la alternativa de la prejubilación o del despido de los mayores (descapitalización intelectual), porque no quieren correr el riesgo del coste fijo que ellos suponen para la empresa.
Por ello creemos necesario promover una estructura empresarial más flexible y eficiente con un nuevo enfoque de relación laboral complementaria a la actual, que facilite canalizar una forma de colaboración profesional mucho más flexible y abierta.
Por su parte, las personas mayores de 50 años, afectadas por procesos de prejubilación o de despido, se pueden encontrar en alguna de las siguientes situaciones:
Recientemente hemos conocido el caso de una persona jubilada con 66 años, dispuesta a seguir trabajando de forma gratuita por el vértigo que le provocaba pasar de golpe de una situación de alta actividad empresarial a una situación de inactividad totalmente desconocida. También he conocido dos casos de personas que nos han dicho que la prejubilación era el camino hacia la depresión; al principio todo fue bien, pero después de los primeros meses de euforia y de viajes, la nueva rutina no llenaba su vida.
No disponemos de estadísticas que nos permitan asociar números y porcentajes a las diferentes situaciones en las que se encuentran y a las que se enfrentan estas personas, pero es evidente que muchas de ellas estarían dispuestas a volver al mundo laboral si recibieran propuestas adecuadas, y si pudieran facturar sin poner en riesgo su pensión de prejubilado.
La situación descrita, la actual falta de flexibilidad del mercado laboral, y la necesidad de las empresas de contar con profesionales cualificados van a provocar importantes cambios en algunos aspectos clave de la gestión como por ejemplo:
La actual crisis económica en España está provocando una constante avalancha de noticias que nos llegan todos los días desde los medios de comunicación, y que afectan, principalmente, a los intereses de las personas, tanto jóvenes como mayores.